viernes, 8 de febrero de 2013

No es tarde

¿Pensás que ya es demasiado tarde? Quizás empezaste el año con un balance negativo y pensás que ya es tarde para recuperar el tiempo o cambiar cosas. Pero, nunca es tarde para empezar de nuevo. Date una oportunidad. Dios también te da oportunidades al darte vida para tomar decisiones que pueden hacer de éste, un año diferente, sorprendente y muy fructífero. Poné todo en sus manos. Él transforma lo más profundo de nuestro ser, y nos da sabiduría y crecimiento todos los días. Su presencia hará en nosotros lo que nosotros mismos no podemos. Considerá cada día y cada situación como una posibilidad de ejercitar tu libertad. Podés elegir, en cierta manera, cómo vivirlo.

No podemos controlar las situaciones, pero podemos elegir la manera de afrontarlas. Las cosas suceden, “se nos escapan de las manos” a veces, muchas. Somos humanos; limitados,  vulnerables, y sin embargo, podemos decidirnos a no dejar que lo que pasa condicione "mi actitud, mi reacción, mi sentir, y mi vivir". Podemos elegir creerle a Dios y no embargarnos de tristeza frente a lo negativo que nos pase. Eso que nos ocurre nos hará más sabios, más fuertes, más sanos, más compasivos y humildes. Dios puede hacer de este tiempo, un tiempo increíble. No es un optimismo exagerado; sólo es fe. Y a Dios eso le encanta. Creámosle, con fe sencilla. 
No es tarde para cambiar ni para empezar de nuevo. Dios nos ama inmensamente y quiere siempre lo mejor para nosotros. Así de sencillo, y así de real.  No es un cliché, una frase hecha. Él lo dijo, y Él no miente. Estás vivo y sos libre para creerle a Dios. 
Él ha prometido ayudarte y estar con vos todos los días. Antes de tomar una decisión, recordá eso. No estás solo. Dios está con vos. Podés afrontar todo con nueva expectativa, porque Dios es bueno y quiere tu bien.