Aunque lo niegues y digas que Él no existe, te ama igual, esperando que decidas creerle. Aunque no le creas, Él te ama. Aunque pienses que no mereces ser amado, Él te ama igual. Aunque pienses que sos demasiado malo, Él te ama igual. Aunque te sientas culpable de tus errores y pecados, Él te ama igual. Dios te espera cada día. Espera que le creas, que confíes, que aceptes su amor para darte una vida nueva, para librarte de la culpa y del sinsentido; para librarte del temor y de la muerte.
¡Dios te ama tanto! Él quiere ser parte de tu vida desde hoy y para siempre.
Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que cree en él, no se pierda, mas tenga vida eterna. Juan 3:16.