Podemos creer y confiar en alguien que nos ha demostrado su amor o su integridad, ¿no es cierto? Dios nos ha mostrado su amor incondicional. Todo lo que nos pide es que creamos en Él y
confiemos sin dudar. ¡Su amor es real! Es una verdad irrefutable y transformadora. Un amor que nos cambia y nos hace fuertes.¡Es verdad! Millones y millones de personas ya lo hemos experimentado.
¿Te parece imposible? Pero es real. ¿Te sentís lejos? Pero, Dios está cerca, a tu lado. ¿Pensás que hiciste todo mal y que Dios no te quiere? ¡Dios te ama tal cual sos, más de lo que podés imaginar!
Si recibís a Jesús en tu corazón como Señor y Salvador, su gran amor hará de vos una nueva persona. Él nos hace hijos
de Dios. Nos abre el Cielo y nos regala vida eterna. Dios, que no miente, lo prometió.
Si te arrrepentiste de lo malo y buscás lo
bueno, si querés conocer a Dios, podés hablar con Él. Él te perdona y te da una vida nueva. Podrás
disfrutar de todo lo bueno y Dios te llenará de gozo el alma para siempre. Comprobalo por vos mismo. Los niños confían sin temor en quien los ama. Confiemos así, con sencillez. ¡Su amor y su bondad son infinitos!