jueves, 8 de junio de 2017

Miradas

La mirada es palabra no pronunciada. La mirada también es comunicación. Puede transmitir lo que pensamos y sentimos; cómo somos y nuestro estado interno. Puede transmitir afecto o rechazo; emociones beneficiosas o nocivas. Percepciones recibidas; reacciones internas; juicios no emitidos; reflejos de nuestro raciocinio y también de nuestra vida emotiva. Por eso, cuando miramos, comunicamos; emitimos un mensaje.
Ciertamente la mirada de Jesús irradiaba amor, ternura, aceptación, y también indignación ante el pecado, firmeza, y fidelidad. Estaba cargada de aceptación y de compasión.
Consideremos nuestra propia mirada, nuestro propio mensaje para quienes nos rodean, con quienes compartimos nuestra vida diaria. Que podamos reflejar la vida de Cristo en nuestra mirada, para transmitir esperanza, llevar alivio, mostrar amor, manifestar que hay una respuesta al clamor de los que sufren, la cual se halla en Jesús. Que Jesús sea siempre nuestro ejemplo. Que nos dé ese amor celestial cada día para compartirlo y bendecir a quienes encontramos ante nuestros ojos.