lunes, 12 de enero de 2015

¿Qué es eso?

"Dios me ama" es una frase que suele oírse mucho. Pero, ¿qué quiere decir? Su significado es sencillo y a la vez ¡muy trascendente! Dios nos ama infinita e incondicionalmente. Su amor es eterno. Su amor por nosotros no tiene fin. Él es el Dios Todopoderoso que creó todo lo que existe,  ¡y nos creó para que fuésemos sus hijos! Simplemente porque nos ama y quiere compartir su amor. Todo lo bueno que existe en la tierra lo hizo para nosotros y por nosotros, los seres humanos.

 Dios no es "como los 'dioses' inventados" por los hombres; esos ídolos reflejan la miseria humana: "dioses" crueles, vengativos, interesados, llenos de ira y violencia. Lo vemos en la mitología de pueblos antiguos. La historia nos cuenta de eso. Algunos sistemas religiosos también. Al Dios único y verdadero se lo define con esta frase: "Dios es amor" (1 Juan 4:16b, La Biblia). ¿No es sorprendente? ¡maravilloso!  

Decimos que ese amor es incondicional porque no nos exige nada para ser receptores de ese amor incomparable. Alguien dijo: "Nada de lo bueno que hagas puede hacer que Dios te ame más. Nada de lo malo que hagas puede hacer que Dios te ame menos. Porque Él te ama infinitamente sin condición y sin límites; no por lo que HAGAS, ni por lo que NO HAGAS". Por supuesto, el amor de Dios no es una licencia para hacer lo que queramos, bueno o malo. Porque no le irá bien a quien hace lo malo

El amor de Dios más bien debe ser una motivación para hacer lo bueno. No porque "debamos hacerlo", sino por gratitud a Aquel que nos ama tanto. Somos hijos del Dios verdadero y bueno. Él mismo nos ayuda a ser mejores cada día.

La vida cristiana es un desafío. No siempre es todo risa y alegría; pero siempre permanecerá el gozo profundo y la esperanza. Los momentos difíciles de la vida están condicionados por Dios. Y Él nos dice en cada momento de la vida: "No temas; yo te ayudo" (Isaías 41:13).