Realmente creo que a Dios le agrada bendecirnos “porque sí”. La Biblia dice que Él se deleita en hacernos bien. Él es amor. Todo lo que somos y tenemos lo hemos recibido de
Dios, sin merecerlo, sin ganarlo. Como seres humanos nos cuesta comprender el
concepto de que Alguien nos ame, nos dé algo y nos haga bien sin merecerlo. Traemos
el bagaje de siglos al respecto: "hay que hacer algo para recibir algo", "tenemos
que ganarnos todo lo que deseemos". Sin embargo, a Dios le place -¡le encanta!- bendecirnos “porque sí”. Simplemente porque Él es bueno y quiere hacernos bien. ¡Es un concepto que revoluciona mi alma!
No tenemos que luchar para alcanzar
su gracia o su aceptación. Su Palabra dice que somos “aceptos en el Amado”. Ese es su regalo
precioso para nosotros. Cuando venimos a Jesús somos transformados en hijos de
Dios. ¡Sus predilectos! Eso trae
descanso.Trae paz y también alegría. Sabemos que podemos descansar en Aquel que nos ama sin condiciones. ¡Su amor nos hace felices!
Tendremos otras luchas, de distinta índole,
pruebas, desafíos para la fe; pero, podemos descansar en el hecho de que Dios
nos ama con un amor eterno, y ha decidido hacernos
bien. Él es quien nos ayuda y nos defiende.
“A Dios le agrada bendecirnos ‘porque sí’
porque se deleita en hacernos bien”. De modo que no te sorprendas de sus
regalos, de sus mimos, de esas cosas que Él hará por vos, que
ni te imaginás.
No hay comentarios:
Publicar un comentario