domingo, 9 de mayo de 2021

El sello

Si miramos más allá de lo que vemos a diario, si nos detenemos a observar con atención (aunque sea desde una terraza en una ciudad ruidosa), descubriremos cosas que siempre estuvieron ahí. Hay detalles que esperan ser descubiertos. Lo verás. Siempre podemos encontrar algo nuevo y bello en lo cotidiano. Incluso en las personas.
En verdad me fascina ver que en todas las cosas creadas Dios ha dejado su sello como una firma. En lo ínfimo de la materia y en lo majestuoso. En mí y también en vos, y en cada uno. Las cosas creadas "nos dan evidencia" del Dios que las creó. Él dejó su sello en toda la creación para que no lo olvidemos. Dios nos creó para conocerlo. Por eso envió a Jesús.
Él vino para mostrarnos a Dios, para que volvamos a Él. Si lo buscás con el corazón, si creés en Él, lo vas a encontrar. 

Es como si el mundo entero nos quisiera gritar que Dios existe y que nos ama. Una flor, un niño, una montaña; un río o el océano mismo. Una tempestad o el sol; un copo de nieve o el cosmos infinito, nos hablan de Dios. Si nos asombra de tal manera lo creado, ¡cuánto más inefable será el Creador! 
"Porque desde la creación del mundo las cualidades invisibles de Dios, es decir, su eterno poder y su naturaleza divina, se perciben claramente a través de lo que él creó..." (Romanos 1:20, NVI). Comprobalo por vos mismo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario